Convicción personal.

Escrito y publicado bajo la fecha de 18 de febrero del 2022 por Kim Núñez.

Lysa Terkeurst en su libro titulado What happen when a woman say yes to God? menciona una serie de convicciones personales en las que se encontró, retos de obediencia que al principio parecían imposibles frente a sus ojos. Como aquella vez en la que Dios le dijo a Sara que le daría un hijo después de haber pasado sus años de concebir, y a Sara le resultó graciosa dicha promesa que recibió de Dios, Dios luego le pregunta a Abraham por qué Sara se reía y dice Dios:

"¿Acaso hay algo imposible para el Señor?..." Genesis 18:14.

Lysa había sentido de Dios una gran convicción que iba en contra de sus propios deseos como mujer y esposa, Lysa había querido una pequeña casa en cierta localidad y el Señor le pedía hacer lo contrario. A Lysa le parecía absurda y fuera de sentido esta convicción que sentía, así que le preguntaba vez tras vez a Dios si no estaba siendo ella la equivocada en cuanto a dicha convicción y Dios respondió que esta convicción sin duda venía de Él.

Segun the free dictionary la palabra convicción puede ser definida como: creencia firme. Yo agregaría a esta definición "Creencia firme basada en el carácter de Dios" si hablamos de convicción espiritual. Pero antes de creer en cualquier convicción que venga de Dios, ¿Crees en Dios? ¿Qué tan poderoso crees a Dios? ¿Tiendes a limitar su poder y reírte de los prodigios que sólo Dios es capaz de hacer?

A lo largo de mi vida cristiana he escuchado a varias personas decir "siento esto de parte de Dios" incluso yo lo he dicho. Resulta difícil poner la confianza en el objeto que queremos hacernos creer a nosotros mismos, nuestros sentimientos y deseos pueden ser tan convincentes como para usar un disfraz llamado "dios" y tener cuidado de esto esta bien si hay un temor a Dios.

Lo cierto es que, la Biblia describe a la perfección los deseos del corazón de Dios para nosotros, sus promesas y su ley, si todas esas "convicciones" que podamos sentir no se ajustan perfectamente a estas tres, puede que, tu convicción no esté viniendo de Dios y haya que examinarla un poco más profundo.

Lysa obedeció y compró la casa grande en el área donde ella no planeaba pero Dios si, su esposo y ella estaban a gusto obedeciendo esta convicción, ambos habían orado para estar seguros antes de comprometerse con una casa como esta que acarreaba tanta responsabilidad. Seguido de este plan, Dios puso en el corazón de Lysa otra gran convicción y la estaba llamando a adoptar hijos, y hablo en plural, por lo que ya podían entender a qué se debía la gran casa y el gozo, paz y confirmación del amor de Dios había inundado su hogar y corazones. Lysa concluye su testimonio animando a obedecer los planes "descabellados" de Dios, porque son descabellados para nosotros, mas Él tiene todo bajo perfecto control.

¿Qué habría pasado si Jesús hubiera dudado en ir a la cruz? ¿O si se hubiera distraído? ¿O quizás dejado engañar por todas las riquezas que Satanás le había ofrecido? La oferta de Satanás era menos dolorosa, más real desde el punto de vista humano, más tangible que morir en la cruz para salvar a todo aquel que lo aceptara como Salvador o no.

Jesús era humano para cuando fue tentado, lo que significa que tenía todas las tentaciones y aflicciones que nosotros ahora, pero jamás dejó de creer, ni de poner el 100% de su confianza en el Dios de imposibles, en el Dios que guía a través de su Santo Espíritu para sus planes donde Él resulta lleno de la gloria a la que estamos creados y destinados a darle.

La convicción personal es lo que Dios está hablando sólo a ti y puede comenzar como una idea, luego no quiere salir de tu mente, yo te sugiero orar por esta convicción, orar que sea evidente que esto es lo que Dios está hablándote, orar por discernimiento y dirección, orar que pueda abrir tus ojos y que no sean tus deseos o cualquier engaño del mundo convenciéndote de algo falso.

La primera convicción personal que yo sentí fuerte en mi vida fue al escuchar Efesios 4, supe que Dios quería que dejara de decir malas palabras para siempre, puede que la tuya parezca pequeña, pero todo lo que viene de Dios es grande siempre.

Dios siempre habla, ¿Cuán constante tú escuchas?

No tardes en obedecer, demorar es desobediencia. Construye y sube al arca, camina entre el mar abierto, levántate cuando Jesús te lo pida porque es Él quien va a estar contigo.

Kim Núñez.